Sostener y envolver la infancia

La infancia es un estado único en la vida, “es patrimonio intangible de la humanidad”. La infancia es nuestro soporte, nuestros cimientos, por eso desde El Puente Azul tratamos de sostenerla y cuidarla con ritmos sanos y procesos en los que puedan ser partícipes. Así, en nuestras aulas, huele a pan, porque tras juntar todos los ingredientes los amasamos y los cocemos, y su olor impregna todo el espacio. Con ello, a los niños les permitimos tener una secuencia de pensamiento claro, siempre a través de la vivencia. En esta época rápida, hiperconectada, buscamos cuidar virtudes esenciales para lo humano como el hacer tranquilo, la conversación para transmitir el conocimiento, la escucha y el silencio. En El Puente Azul queremos apostar por espacios reales de calma, de hacer con nuestras manos, de paciencia para conquistar nuevos retos y aprendizajes, de vivir la infancia sin la prisa que impera en la sociedad. Cuidar el vínculo, cuidar lo humano.